Donde hay magia no hacen falta trucos...
Luis Oliván es un aragonés enamorado del campo, de su tierra y de la garnacha.
Vinifica en las zonas de Bespén (Huesca, comarca de la D.O de Somontano) y Ainzón (Zaragoza, comarca de la D.O del Campo de Borja) sin trucos porque tiene magia de sobra a sus espaldas y todo lo que toca lo convierte en delicadeza, armonía y equilibrio.
Clarete de Bespén 2019
La Hoya de Huesca es una pequeña sub zona dentro de la comarca del Somontano donde sopla el Cierzo y evita que el gran enemigo de la uva, el hongo, se instale en sus viñas.
De una viña vieja donde conviven variedades autóctonas del Somontano. blancas y tintas (Alcañón y Miguel d’Arco o también llamada Moristel) ha elaborado 1.200 botellas de esta maravilla. Es un vino vertical, sin refritos de esos tan habituales en las grandes bodegas del momento, puro, delicado auténtico.
Es un vino que no tiene casi nada... No tiene levaduras añadidas, no tiene fermentación maloláctica, no tiene maceración con pieles ni tampoco tiene barrica. Es un vino desnudo que Luis Oliván hace grande cada añada.
Notas de CATA
De color fresa pálido, con aromas a fruta blanca, fresas del bosque con un fondo mineral. En boca es fresco y sápido, con una buena acidez.
Maridaje Para tomar con arroces, pasta, verduras y legumbres.
No te despistes solo 1.200 botellas y a mí me quedan un par de docenas y no habrá más hasta enero o febrero de 2022....
